domingo, 18 de diciembre de 2011

"Los niños jugaban a los fusilamientos" Moreno Villa, tutor en la Residencia de Estudiantes en tiempos de Lorca y Buñuel, relató en un diario, inédito


"Los niños jugaban a los fusilamientos"
Moreno Villa, tutor en la Residencia de Estudiantes en tiempos de Lorca y Buñuel, relató en un diario, inédito hasta ahora, el inicio del asedio franquista a Madrid
http://www.elpais.com/articulo/cultura/ninos/jugaban/fusilamientos/elpepicul/20111218elpepicul_1/Tes
JAVIER RODRÍGUEZ MARCOS - Madrid - 18/12/2011

¿Quién es ese hombre maduro que aparece en las fotos de juventud de Lorca, Dalí y Buñuel? Si esa es la pregunta la respuesta es: José Moreno Villa, un malagueño de 1887 muerto en el exilio de México en 1955. No mucho menor que Juan Ramón Jiménez (le llevaba seis años) ni mayor que Pedro Salinas (al que llevaba cuatro), la manía clasificatoria ha dejado a Moreno Villa fuera de foco. El mismo Rafael Alberti reconoció en La arboleda perdida que cuando se decidió a escribir sus recuerdos, el único referente que tenía para retratar la edad de plata de la cultura española era Vida en claro, la autobiografía que Moreno Villa publicó en 1944, uno de los grandes libros de memorias de la literatura hispánica. La obra es el primer testimonio del mundo roto con el golpe franquista, también el primero que narra la vida en la Residencia de Estudiantes de Madrid. Allí llegó el escritor y dibujante en 1917 para ejercer como tutor de la casa, y de allí fue evacuado, 20 años después, junto a los intelectuales -Machado entre ellos- que siguieron al Gobierno republicano a Valencia.

"No sacaré nada; puede que dentro de unos días volvamos todos, pensé para engañarme", recordó que dijo al dejar su habitación. En la maleta, eso sí, metió el manuscrito de un diario que llamó Notas desde el Madrid sitiado. Aquellas cuartillas han permanecido inéditas 74 años, pero la próxima semana verán la luz dentro de un volumen de 700 páginas titulado escuetamente Memoria. Recopilado por Juan Pérez de Ayala y editado por la Residencia de Estudiantes, el libro incluye Vida en claro y todos los textos autobiográficos del autor malagueño.

Desde la colina de la Residencia de Estudiantes, convertida en cuartel y en la que apenas quedan seis "fijos", el Madrid que retrata Moreno Villa es una ciudad en la que los tranvías marcan la normalidad. Su sonido es la señal de que los "facciosos" no han entrado en la capital. La suciedad de las calles -"no se barre, casi ni se riega"- es otra señal: hay una guerra y los sublevados acechan la Casa de Campo. Él lo sabe bien: mientras puede trabaja como archivero en el cercano Palacio Real, rebautizado como Nacional. "En estos días, que son los más críticos", escribe el 30 de octubre de 1936, "sorprende la cantidad de milicianos que contraen matrimonio. Dice la gente que los novios piensan en la viudedad que puede quedar a las novias".

Todo es inquietante. Demasiado silencio o demasiado poco: "Los hombres que antes no levantaban su voz son los únicos que ahora vociferan y cantan". Quince días después, las incursiones aéreas son una costumbre. "El ataque a Madrid dura ya una semana. Los periódicos extranjeros afectos a los nazis comienzan a ver fracasado el intento. Hoy, a las ocho y media de la mañana, hubo un combate de aviones sobre la población. Lo vi desde mi cuarto. Es un espectáculo que entusiasma a la gente. Yo creo que por lo que tiene de deportivo. No se ve la sangre y sí la agilidad y el ataque, el esguince y la vuelta". Son los tiempos en que todavía hay niños en los parques: "Jugaban a la guerra y a los fusilamientos".

Con los primeros bombardeos, que "respetaban una zona de Madrid, la de lujo, y se cebaban en los barrios pobres", el drama baja de las nubes. Aunque fiel a la República hasta considerarse un "miliciano de la cultura" después de ser rechazado por su edad en la oficina de alistamiento, Moreno Villa no deja de consignar los desmanes dentro de su propio bando: "¡Cuántos amparados no habrá en las embajadas! Durante estos meses he visto que estas necesitaban echar mano de otros edificios, indudablemente refugios de gente insegura, es decir, culpable o simpatizante con el movimiento. Aunque también de otras que no hicieron nada malo. ¡Es tan complicada la situación!".

En una guerra, dirá, la conducta está por encima del razonamiento -"ya no valen literaturas"-, pero él alcanza a ver claro en el río revuelto: "Estoy por creer que las ferocidades mayores cometidas en esta hecatombe doble se debieron a estos cobardes que se camuflaban de revolucionarios o purificadores; de estos cucos y ventajistas de retaguardia. Conozco casos terribles de bajas venganzas cometidas por individuos ínfimos resentidos por las órdenes antiguas de un superior administrativo".

Moreno Villa estaba en Estados Unidos dando conferencias como enviado del Gobierno cuando se convirtió en el primer refugiado invitado oficialmente por México. Llegó en mayo de 1937. Allí se casó y tuvo un hijo, José Moreno Nieto. Fue él quien donó a la Residencia de Estudiantes el archivo que contenía el diario inédito. "Mi padre murió cuando yo tenía 14 años. No recuerdo que me hablara mucho de la guerra. Hablaba más de su infancia", dice por teléfono desde Friburgo, donde vive. Curiosamente, ahí había estudiado química José Moreno Villa. "Todavía se le recuerda más en México que en España", dice su hijo. Cosas de la mala memoria.
Tres genios antes de serlo

Poeta, narrador, artista y crítico de arte, José Moreno Villa rayó a gran altura en todo lo que hizo pese a no gozar de la popularidad de sus amigos más ilustres, para los que fue un precursor. Pasado el tiempo, Antonio Muñoz Molina lo convirtió en personaje de la novela La noche de los tiempos y José Ramón Fernández hizo lo propio en la obra de teatro La colmena científica o El café de Negrín, último premio Nacional de Literatura Dramática. Gran dibujante -"una exposición de dibujo español moderno sin Moreno Villa está coja", dice Juan Pérez de Ayala-, trazó una famosa caricatura de Lorca al piano y el autor de Yerma le dedicó un poema. Pero el tutor de la Resi trazó también grandes retratos con palabras, los consagrados, entre otros, a la tríada formada por Buñuel, Dalí y el propio Lorca: "Se sentían los gallitos triunfadores, aunque pasaban días sin blanca".

A Dalí nunca le perdonó sus coqueteos con Franco: "Melenudo, no muy limpio, enfrascado siempre en las lecturas de Freud", de vocación "indudable" y buen oficio, termina "en Estados Unidos dedicado a pasmar a los esnobs con sus extravagancias y payasadas". Buñuel, entretanto, terminó convirtiéndose en uno de sus íntimos en el exilio mexicano. Así, en un artículo de 1952 incluido en Memoria, matiza su visión del cineasta aragonés, al que había pintado en los años veinte, "un mocetón atlético, hijo de padres ricos" que saltaba con pértiga "semidesnudo". "No quedamos satisfechos de tales líneas ni él ni yo", dirá luego. De ahí que, admirador de su cine, lo defina como "una conjunción feliz entre lo tosco y lo fino. Un baturro no puede ser cursi".

sábado, 22 de octubre de 2011

El Estado compra una colección de dibujos de García Lorca


El Estado compra una colección de dibujos de García Lorca

Pagó 120.00 euros tras ejercer el derecho de tanteo en una subasta en Barcelona
Agencias / Barcelona | Actualizado 21.10.2011 - 05:00

El Ministerio de Cultura adquirió ayer en una subasta en Barcelona una colección de diez dibujos del poeta granadino Federico García Lorca datados en 1930 por 120.000 euros.

Inicialmente, la subasta se la había adjudicado un particular por 100.000 euros más una comisión del 20 %, pero el Estado ha ejercido su derecho de tanteo para conseguir estos dibujos en los que el poeta diseñaba el vestuario para su obra La zapatera prodigiosa, que se estrenó en el Teatro Español de Madrid en 1930.

García Lorca regaló esta colección a la actriz catalana Margarita Xirgu, que encarnó a la protagonista de La zapatera prodigiosa en la primera función y para quien el poeta había diseñado alguno de los vestidos.

Los dibujos están elaborados con un estilo naif, pintados con lápices de colores, e incluso, en uno de ellos, aún están enganchadas dos telas de colores azul y rosa que le sirvieron al artista de referencia para decidir la tonalidad del vestido.
http://www.blogger.com/img/blank.gif
El catálogo se puede dividir en dos grandes grupos: uno más personal y de ascendencia surrealista, y otro de tipo más práctico, ligado frecuentemente a la producción teatral.

La subasta se realizó ayer tarde en la Sala de Subastas Balclis de Barcelona, donde las obras habían llegado de manos de un particular.

Nada se ha dicho aún del destino de estos dibujos adquiridos por el estado a través de esta subasta.

http://www.diariodecadiz.es/article/ocio/1093778/estado/compra/una/coleccion/dibujos/garcia/lorca.html

domingo, 9 de octubre de 2011

Siete corazones


Canción del muchacho de siete corazones
(Federico García Lorca)
Siete corazones
tengo.
Pero el mío no lo encuentro.
En el alto monte, madre,
tropezábamos y el viento.
Siete niñas de largas manos
me llevaron en sus espejos.
He cantado por el mundo
con mi boca de siete pétalos.
Mis galeras de amaranto
iban sin jarcias y sin remos.
He vivido los paisajes
de otras gentes. Mis secretos
alrededor de la garganta
¡sin darme cuenta! iban abiertos.http://www.blogger.com/img/blank.gif
En el alto monte, madre,
(mi corazón sobre los ecos
dentro del álbum de una estrella)
tropezábamos yo y el viento.
Siete corazones
tengo.
¡Pero el mío no lo encuentro!


http://bibliopoemes.blogspot.com/2011/10/cancion-del-muchacho-de-siete-corazones.html



Ilustración  Mónica Pérez.

http://elgatodepapel.blogspot.com.es/

Jean-Dominique Krynen - Cinco Poemas del Romancero Gitano

Título
Jean-Dominique Krynen - Cinco Poemas del Romancero Gitano
Responsables

Jean-Dominique Krynen; poeta
Actividad
Recital poético-musical
Fecha
23 de Abril del 2010, a las 20:00.
Organizador
Universidad de Granada
Entidades organizadoras
Cátedra 'Federico García Lorca' de la UGR
Lugar
Aula Magna de la Facultad de Medicina
Descripción

Granada acoge el estreno mundial de la obra musical “Cinco Poemas del Romancero Gitano” del compositor francés Jean-Dominique Krynen, que alternará las letras de estos versos con escenas cantadas en forma de dúo y solo.
Esta lectura musical es el colofón del programa de actividades desarrollado por la Universidad de Granada dentro de la Cátedra Federico García Lorca para conmemorar el 80 aniversario de la publicación de Romancero Gitano, de la que Krynen destacó ayer en rueda de prensa durante la presentación “su frescura”.
El compositor francés ha elegido para esta obra los poemas Preciosa y el aire, La monja gitana, Romance de la pena negra, Muerte de Antoñito el Camborio y San Gabriel, cuyos versos le han permitido encadenar de “forma natural” sensaciones de dolor, espera y ansiedad, así como intercambiar temáticas que harán coincidir en el escenario a la soprano Laura Sabatel y el barítono Ángel Jiménez.
Krynen, que heredó de su padre “la pasión por esta tierra y la obra de Lorca”, comenzó a trabajar en la lectura musical de estos poemas desde los años noventa, atraído por “el frescor de la mirada” del poeta y el modo en que éste retrataba en sus poemas “la invasión de la naturaleza” o la “soledad del ser humano”.
“Para que la música llegue a emocionar debe ser nueva, brotar de mundos nuevos como los que retrata Lorca”, comentó el compositor francés, que creará a través de las notas musicales las atmósferas y ambientes que le evocan los textos del poeta granadino.
El propio compositor francés será el encargado de la introducción de la obra que será interpretada por la soprano granadina Laura Sabatel, el barítono Ángel Jiménez, el Trío Sulayr, (Ana Luque, violinista; el violonchelista Gabriel Delgado; el pianista Diego Juan) y Antonio Carvajal como lector. Nacido en Toulouse (1958), el compositor creció en un ambiente universitario e hispanista (su padre, que fue académico correspondihttp://www.blogger.com/img/blank.gifente de la Real Academia Española, cuenta en su labor con estudios sobre aspectos del barroco español y un estudio imprescindible sobre el sentido de la tragedia en Federico García Lorca).
La UGR pretende llevar esta obra a los campus de Ceuta y Melilla, así como a otras ciudades extranjeras, todo ello en un marco universitario, mientras que ya está confirmada la representación en Buenos Aires para el próximo 19 de agosto.


http://www.cacocu.es/static/CacocuElementManagement/*/jean-dominique-krynen-cinco-poemas-del-romancero-gitano/ver

miércoles, 5 de octubre de 2011

sábado, 1 de octubre de 2011

Balclis subasta el conjunto de dibujos más importante de Lorca Jueves, 29 de Septiembre de 2011 11:01 hoyesarte.com



-La casa de subastas Balclis de Barcelona sacará a la venta los próximos días 19 y 20 de octubre el conjunto de dibujos más importante de Federico García Lorca (1898-1936). Se trata de una serie de diez dibujos, la mayor en venta hasta ahora, en un excelente estado de conservación, que el poeta diseñó para el vestuario de su obra La Zapatera Prodigiosa, estrenada el 24 de diciembre de 1930 en el Teatro Español de Madrid.

Estos dibujos –que parten de un valor de 100.000 euros– están considerados indispensables en su corpus y presentan sus rasgos más definitorios. Concebidos en estilo naíf, claramente infantil, la aparente ingenuidad de estos figurines y el uso simbólico del color evocan un mundo infantil de ascendencia surrealista. Es sintomático el uso de los lápices de colores, que nos evoca el mundo de los niños. La Zapatera Prodigiosa centra su historia en la Andalucía profunda de los años 30, cuya protagonista es una joven muchacha que lucha contra todo lo que le rodea. En su primera puesta en escena, Margarita Xirgu encarnó el papel de la protagonista principal.

Tres grandes grupos

-Pionera en la modernización de la escena española, Xirgu fue considerada la actriz catalana más importante del siglo XX junto con María Guerrero. García Lorca estrenó casi todas sus obras importantes con ella: Mariana Pineda, con decorados de Salvador Dalí (1927); La zapatera prodigiosa (1930); Yerma (1934), Doña Rosita la soltera o El lenguaje de las flores (1935) y el reestreno de Bodas de sangre (1935).

Con motivo de la gran amistad entre la actriz y el escritor granadino, éste le hizo obsequio del lote de figurines de La Zapatera Prodigiosa, que hoy llega a Balclis a través de un particular, ya que la misma se lo regaló a su hermano que, siendo profesor, a su vez lo regaló a uno de sus alumnos.

Ascendencia surrealista

El catálogo de dibujos de Lorca se puede dividir en dos grandes grupos: unos más personales y de ascendencia surrealista, y otro de tipo más práctico, ligado frecuentemente a su producción teatral, cuando a veces se encargaba de hacer los decorados y figurines de sus mismas obras. Estos dibujos servían para describir cada uno de los personajes de sus dramas y comedias ya que, aparte de mostrar el mundo poético del granadino, servían como herramienta para el diseño de los vestuarios y de las escenografías de sus obras teatrales. De ahí, por ejemplo y en relación a La zapatera prodigiosa, de la importancia dada por Lorca a los tejidos, colores y adornos, incluso adjuntando muestras reales de tejido. Existen fotografías de la representación original, en la que aparece Margarita Xirgu ataviada con un traje igual al de uno de los dibujos que se subastan en Balclis, lo que permite apreciar la similitud entre el figurín y el vestido final.

En el caso de La zapatera prodigiosa se ha relacionado su corte con la moda del Siglo de Oro, pero sobre todo con variantes contemporáneas del baile clásico elaborado en la corte de los zares en el siglo XX, o con la tradición de los carnavales venecianos. No obstante, la veta andaluza asoma en los vestidos masculinos, adquiriendo con todas estas referencias un cariz universal.

Los especialistas han destacado de este lote su carácter excepcional, ya que se ha de situar entre 1927 y 1932, es decir, en el mejor momento de la producción dibujística de Lorca. Pero asimismo, hasta su aparición en Balclis, se trataba de la colección de dibujos más importante no perteneciente a la familia de García Lorca que permanecía aún en paradero desconocido.

Información del lote:
Figurines de La zapatera prodigiosa
Federico García Lorca
Diez dibujos a tinta y lápices de colores realizados en 1930. La zapatera prodigiosa fue estrenada en el Teatro Español de Madrid el 24 de diciembre de 1930. Procedencia: colección Margarita Xirgu i Subirà (Molins de Rei 1888-Montevideo 1969); colección Miquel Xirgu i Subirà (Girona 1892 – Barcelona 1954); colección particular, Barcelona
72,7 x 21,7 cm
100.000 euros

Se subastan los figurines que Lorca pintó para 'La zapatera prodigiosa' El poeta los regaló a Margarita Xirgu tras el estreno de la obra en 1930

http://www.elpais.com/articulo/cataluna/subastan/figurines/Lorca/pinto/zapatera/prodigiosa/elpepiespcat/20110930elpcat_11/Tes?print=1

JOSÉ ÁNGEL MONTAÑÉS - Barcelona - 30/09/2011http://www.blogger.com/img/blank.gif

La sala de subastas Balclis saca a la venta los próximos 19 y 20 de octubre los figurines que Federico García Lorca creó en 1930 para el vestuario de su obra La zapatera prodigiosa. Estrenada en el Teatro Español de Madrid, en 1930, estaba protagonizada por Margarita Xirgu, su actriz fetiche con la que trabajó en casi todas sus obras importantes, como Mariana Pineda y Bodas de sangre. Los 10 dibujos de 230 por 175 milímetros (ocho de vestidos de mujer y dos de hombre) se enmarcan en el más puro estilo de pintar lorquiano, caracterizados por su modo naif, remarcado por el uso de lápices de colores, que evocan el mundo infantil.

Los figurines que realizó Lorca para este romance popular, que cuenta la historia de una joven casada por conveniencia con un viejo zapatero que vive acosada por las continuas críticas de sus vecinas, tienen varios pluses. Junto a todos los dibujos el autor granadino anotó de su puño y letra algunos de los detalles que quería para sus creaciones. En el que la protagonista debía llevar durante el segundo acto, se puede leer: "Traje rojo violento y rosa roja. Sin pendientes. Más vuelo que en el traje anterior. Un brazo desnudo. Franja al cuello y cintura de rojo distinto", que denotan el detalle con el que trabajaba el granadino. En otro, incluso cosió al papel con un alfiler dos trozos de muestra real de tejido para confeccionar el traje de una de las vecinas criticonas. Y ahí permanecen.

Se conservan imágenes de la representación original en la que Margarita Xirgu y el resto de actores aparecen ataviados con los trajes que Lorca pensó y que permiten apreciar la similitud entre el figurín y el vestido final.

La historia de cómo se han conservado hasta ahora los dibujos es conocida. Tras el estreno de la obra, el autor regaló los dibujos a Margarita Xirgu. La actriz los dio a su hermano, que, siendo profesor, los regaló a uno de sus alumnos. Por fin, un hijo de este los llevó hace unos meses a la sala de subastas para venderlos. Fuentes de Balclis han destacado "el buen estado de conservación de las obras y la sensibilidad de sus dueños, una familia muy relacionada con el mundo del teatro", aunque no han desvelado su identidad.

En los últimos meses se ha procedido a verificar la autenticidad de las obras con ayuda de la fundación del autor de Doña Rosita la soltera y Romancero gitano. "La obra pictórica de Lorca es voluntariamente infantil y muchas veces se confunde lo naif con lo fácil y eso hace que hayan salido al mercado muchos dibujos falsos de este artista", comentan desde la sala de subasta barcelonesa. "Algo que perjudica su valor económico", remarcan.

El precio de salida de los 10 dibujos ha sido fijado por Balclis en 100.000 euros, algo que califican de "no muy alto". El lote es el más completo que se ha subastado hasta ahora, y tiene como antecedente la venta en 2004 en una sala de subasta madrileña de cuatro de sus dibujos que alcanzaron un precio de 10.000 euros cada uno.

Especialistas en la obra pictórica de Lorca, como Mario Hernández, que publicó en 1986 un inventario de estas obras, clasifican estos dibujos en el mejor periodo de producción artística del polifacético autor. El interés del lote es mayor porque se trata de uno de los pocos conjuntos pictóricos que no estaba en manos de la familia de Lorca y que permanecía en paradero desconocido. El mes próximo tendrán la oportunidad de incorporarlos a los fondos que la fundación del poeta custodia en Madrid.

Se subastan los figurines que Lorca pintó para 'La zapatera prodigiosa' El poeta los regaló a Margarita Xirgu tras el estreno de la obra en 1930

JOSÉ ÁNGEL MONTAÑÉS - Barcelona - 30/09/2011

La sala de subastas Balclis saca a la venta los próximos 19 y 20 de octubre los figurines que Federico García Lorca creó en 1930 para el vestuario de su obra La zapatera prodigiosa. Estrenada en el Teatro Español de Madrid, en 1930, estaba protagonizada por Margarita Xirgu, su actriz fetiche con la que trabajó en casi todas sus obras importantes, como Mariana Pineda y Bodas de sangre. Los 10 dibujos de 230 por 175 milímetros (ocho de vestidos de mujer y dos de hombre) se enmarcan en el más puro estilo de pintar lorquiano, caracterizados por su modo naif, remarcado por el uso de lápices de colores, que evocan el mundo infantil.

Los figurines que realizó Lorca para este romance popular, que cuenta la historia de una joven casada por conveniencia con un viejo zapatero que vive acosada por las continuas críticas de sus vecinas, tienen varios pluses. Junto a todos los dibujos el autor granadino anotó de su puño y letra algunos de los detalles que quería para sus creaciones. En el que la protagonista debía llevar durante el segundo acto, se puede leer: "Traje rojo violento y rosa roja. Sin pendientes. Más vuelo que en el traje anterior. Un brazo desnudo. Franja al cuello y cintura de rojo distinto", que denotan el detalle con el que trabajaba el granadino. En otro, incluso cosió al papel con un alfiler dos trozos de muestra real de tejido para confeccionar el traje de una de las vecinas criticonas. Y ahí permanecen.

Se conservan imágenes de la representación original en la que Margarita Xirgu y el resto de actores aparecen ataviados con los trajes que Lorca pensó y que permiten apreciar la similitud entre el figurín y el vestido final.

La historia de cómo se han conservado hasta ahora los dibujos es conocida. Tras el estreno de la obra, el autor regaló los dibujos a Margarita Xirgu. La actriz los dio a su hermano, que, siendo profesor, los regaló a uno de sus alumnos. Por fin, un hijo de este los llevó hace unos meses a la sala de subastas para venderlos. Fuentes de Balclis han destacado "el buen estado de conservación de las obras y la sensibilidad de sus dueños, una familia muy relacionada con el mundo del teatro", aunque no han desvelado su identidad.

En los últimos meses se ha procedido a verificar la autenticidad de las obras con ayuda de la fundación del autor de Doña Rosita la soltera y Romancero gitano. "La obra pictórica de Lorca es voluntariamente infantil y muchas veces se confunde lo naif con lo fácil y eso hace que hayan salido al mercado muchos dibujos falsos de este artista", comentan desde la sala de subasta barcelonesa. "Algo que perjudica su valor económico", remarcan.

El precio de salida de los 10 dibujos ha sido fijado por Balclis en 100.000 euros, algo que califican de "no muy alto". El lote es el más completo que se ha subastado hasta ahora, y tiene como antecedente la venta en 2004 en una sala de subasta madrileña de cuatro de sus dibujos que alcanzaron un precio de 10.000 euros cada uno.

Especialistas en la obra pictórica de Lorca, como Mario Hernández, que publicó en 1986 un inventario de estas obras, clasifican estos dibujos en el mejor periodo de producción artística del polifacético autor. El interés del lote es mayor porque se trata de uno de los pocos conjuntos pictóricos que no estaba en manos de la familia de Lorca y que permanecía en paradero desconocido. El mes próximo tendrán la oportunidad de incorporarlos a los fondos que la fundación del poeta custodia en Madrid.

Los bocetos de García Lorca salen a subasta

Los bocetos de García Lorca salen a subasta
01.10.11 - 00:15 -
COLPISA. |

Los bocetos de Federico García Lorca para el vestuario de 'La zapatera prodigiosa' se ponen a la venta con un precio de salida de 100.000 euros. Regalo del poeta a la actriz Margarita Xirgu, los diez dibujos son el único conjunto de dibujos 'lorquianos' que permanecía en manos privadas. La firma Balclis (www.balclis.com) pondrá a la venta el 19 y el 20 de octubre una serie de diez apuntes de Lorca de la obra estrenada el 24 de diciembre de 1930.

sábado, 24 de septiembre de 2011

viernes, 9 de septiembre de 2011

Ian Gibson: «Lorca es del mundo y de la humanidad» El hispanista apela a la "magnanimidad" de la derecha y de la familia para encontrar los restos del poeta 08.09.11 - 16:17 - DANIEL ROLDÁN | MADRID

Ian Gibson (Dublín, 1939) muestra cierta resignación cuando se le pregunta sobre los restos de Federico García Lorca, el hombre (o el mito) al que lleva enganchado cuatro décadas. El último intento de encontrar al poeta se produjo hace dos años, en la zona del Alfacar (Granada) donde fue fusilado. Sin embargo, después de tres meses de excavaciones, los investigadores determinaron que en esa zona no se había enterrado a nadie. Después de este descubrimiento, la búsqueda de los huesos está parada. "No me gusta no saber dónde están. Es malo para la familia y para el mundo", argumenta el hispanista. Las teorías sobre dónde está la sepultura del poeta son dispares. Que si están en la cripta de la catedral de Granada, en la Huerta de San Vicente o incluso en Nerja. Ideas que se quedarán en eso, ya que Gibson está convencido de que desde las instituciones granadinas no se va a hacer nada. "El ayuntamiento y la diputación están en manos del PP y no quieren saber nada de dónde están", indica el historiador, que también mandó un recado a los socialistas. "Cuando estaban ellos, no quitaron el monumento a Primo de Rivera". Gibson se muestra partidario de un partido que "desentierre de verdad a los muertos" o políticos que asuman este compromiso, sean del partido que sean. Pone como ejemplo al Ayuntamiento de Málaga (gobernado por los populares), que ha permitido las exhumaciones en el cementerio de San Rafael, donde se han encontrado tres mil cuerpos. El hispanista británico está convencido de que encontrar a Lorca, "el desaparecido más famoso de la Guerra Civil", sería bueno porque "España tiene que recuperar a sus muertos". "Lorca pertenece al mundo y la humanidad y se debería hacer un esfuerzo. Si la derecha fuera magnánima, todo esto se podría resolver", argumentó el escritor, que también criticó a la familia del poeta por su negativa a la exhumación. "No es normal que una familia que dice ser progresista esté como una piña en contra. No lo entiendo”, comenta. A Gibson le encantaría añadir el capítulo sobre la tumba de Lorca a su monumental biografía sobre el poeta de Fuente Vaqueros que publicó en dos tomos en 1985 y 1987. Ahora, cuando el 18 de agosto se cumplieron 75 años de su muerte, Crítica publica la obra de mil quinientas páginas en un solo volumen y en la que Gibson solo ha matizado algunos puntos. La voz y América A pesar de llevar más de cuarenta años estudiando la vida del genio granadino, el hispanista dublinés todavía cree que hay lagunas biográficas. Además de la consabida muerte, hay pocos detalles sobre la estancia de García Lorca en América. Poco se sabe de lo que hizo en Nueva York, aunque Gibson considera que la clave la puede tener la familia de Rafael Martínez Nadal, que guarda con celosía la correspondencia que mantuvieron los dos durante años. El poeta español mantuvo una estrecha amistad, algunos autores hablan de pasional, con su antiguo compañero en la Residencia de Estudiantes. Tampoco se tiene mucho conocimiento sobre qué hizo el escritor en Cuba, donde permaneció cuatro meses después de abandonar la ciudad de los rascacielos. "Se lo pasó muy bien. No hay que olvidar que Lorca era músico y tocaba muy bien el piano", apunta el historiador. En alguna carta a su madre, menciona que había interpretado "chuminadas", pero que en realidad eran piezas magistrales realizadas al piano. Pero Gibson anhela otra cosa por encima de encontrar alguna carta o esbozos de poesía. Estaría encantado ("me moriría allí mismo") si pudiera escuchar la voz de Federico García Lorca. El escritor andaluz fue muy prolijo en sus actuaciones. Acudió a muchas entrevistas y participó en muchos recitales donde las radios, sobre todo en Argentina y Uruguay, lo grababan todo. Pero hasta ahora no hay ninguna grabación. "En algún sótano de Buenos Aires, estará la voz de Lorca en un disco sin etiqueta", se muestra esperanzado Gibson. Porque en los dos países que comparten la desembocadura del río de La Plata, Lorca fue un auténtico ídolo. "Aparecía en todos los periódicos. La gente en Buenos Aires llenó durante meses un teatro para ver sus obras. No solo era el poeta, sino también un gran hombre del teatro", aduce Gibson. http://www.ideal.es/granada/rc/20110908/cultura/gibson-lorca-mundo-humanidad-201109081605.html

domingo, 26 de junio de 2011

Junto a la fuente mataron al ruiseñor

http://www.ideal.es/almeria/v/20110626/cultura/junto-fuente-mataron-ruisenor-20110626.html
Calurosa acogida a Aynadamar, la ópera que recrea el asesinato de Federico García Lorca en Víznar.http://www.blogger.com/img/blank.gif
26.06.11 - 01:35 -
ANDRÉS MOLINARI | GRANADA.


La noche del 24 de junio de 1927, el teatro Goya -presagio de fusilamientos-, de Barcelona, era testigo del estreno de la Mariana Pineda de García Lorca, por la consagrada actriz Margarita Xirgu, con decorados de Salvador Dalí. Un día después, un 25 de junio, pero del año 2011, otra vez los tres reunidos, esta vez en el Generalife, con decorados de ciprés y de estrellas, de nuevo con una salva de aplausos que no sólo premian el arte derrochado sino también el canto a la libertad y la denuncia de quienes la mancillan. Margarita, Mariana y Federido. Un trébol de feminidades arrancado con furia por la intolerancia y el miedo a la verdad.
La Mariana de Lorca llegó a Granada el 29 de abril de 1929, al escenario de aquel teatro Cervantes, que cayó bajo una piqueta que derribaba teatros, seguramente hermana de los fusiles que acribillaban poetas. Allí estuvo, en primera fila, Manuel de Falla, que hubiese disfrutado anoche con la música de Goliojov, con su aire unas veces melodioso y otras vanguardista, con esa mezcla sutil y contrastante entre sinfonismo y flamenco, con ese ruido oscuro y tenaz, casi mahleriano, que envuelve algunas escenas de grisura y de torpeza. para luego resurgir, nítidamente sudamericano, enroscado en ritmos de la tierra y de la furia, dejando un hálito de nube para que las tres cantantes abran sus gargantas al viento con singular acierto armónico.
Xirgu en Granada
No era la primera vez que Margarita venía a Granada. Siempre le gustó esta ciudad que anoche visitó en sombras junto a Mariana. Obtendría un gran éxito desde el día 13 de febrero de 1915, en el mencionado teatro Cervantes. En aquella ocasión traía nada menos que la Elektra de Hofmannsthal y la Salomé de Wilde. Cómo me recordaba anoche estas heroínas algunas poses de María Hinojosa y de Marina Pardo, diseñadas por Luis de Tavira. Los éxitos de la Xirgu en Granada se repitieron en marzo de 1919 y en febrero de 1921. Luego fue memorable otro mes de junio, el de 1935, cuando Federico y ella se unieron para homenajear a Lope de Vega en el Carlos V. Parece mentira, tan cerca del Generalife, tan escenario ahora de este Festival, que se acaba de colgarse uno de sus mejores baldone.
Pero Margarita no pudo volver a Granada. Incluso murió lejos de España, allá en Montevideo. Y desde allí nos llegaron los últimos ecos de su arte y de su amistad con Federico, reflejada de forma magistral en la baraja de imágenes con las que anoche nos regaló la vida a los que estuvimos en el estreno de Aynadamar.
Un derroche de arte
Osvaldo Golijov y Henry Hwang han creado una obra que aparenta vanguardia, pero que destila clasicismo por muchos de sus poros. Han titulado cada acto como imágenes, como si se tratase de un álbum de amigas, de unas fotografías de documental de guerra, de una almohada agridulce sobre la que aletean los sueños, lo que fue con lo que pudo ser.
Tres imágenes para una noche en aquellos jardines nazaríes también henchidos de sueño y de nostalgia. Noche en la que fue imposible retener la imaginación. Del Generalife a los montes de Víznar, o del Madrid del 14 de abril a La Habana de Federico, todo fue un ir y venir de la loca de la casa, un desasosiego de arte, de sonidos y de muerte. La Sabika fue un almuecín que pregonaba, pronunciaba y cantaba justo lo que la fuente de Aynadamar solo alcanzó a llorar, a expresar en las lágrimas que le dan nombre. Ópera del siglo XXI, pero sin dejar mirar al pretérito, porque toda obra de arte, excepto Altamira, siempre tiene sus fuentes y sus magisterios. Una vedija de Pirandelo cuando Mariana busca a Federico, mucho azoque del barroco cristiano cuando sale en procesión el garrote vil o se celebra la última cena de las tres.
Ainadamar, la fuente que no pudo calmar la sed del poeta aquel agosto sangriento del 36, ahora ha dado nombre y pretexto a una obra de arte grandiosa, una maravilla escénica que quedará grabada en los anales del Festival granadino, una ópera de música atrevida y texto henchido de sugerencias y de evocaciones, que pregonará por el mundo de lo que fueron capaces de hacer unos asesinos de Granada y de cómo han restaurado aquella herida unos genios de la música y del teatro, llegados de todas partes del mundo. Federico, ruiseñor que anida en nuestra remembranza, anoche también prestó su voz, su obra y su figura a los actores, cantantes y bailarines de esta portentosa creación. Ellos supieron qué hacer.
Luego, el poeta se asomó entre los cipreses del Generalife y vio cómo lo recordamos desde Argentina hasta la Sabika, desde La Habana hasta Víznar y, seguramente, sonrió.

domingo, 3 de abril de 2011

FEDERICO GARCÍA LORCA Y LA TRADICIÓN POÉTICA ARÁBIGOANDALUZA

FEDERICO GARCÍA LORCA Y LA TRADICIÓN POÉTICA ARÁBIGOANDALUZA
Los Andaluces
Jueves, 01 de Abril de 2010 18:55

En el presente trabajo me interesa precisamente esa última alteridad del mundo árabe, y más específicamente, me interesa ver en qué medida Lorca tiene o no una deuda con la poesía arábigoandaluza, mayormente en su Diván



Miguel Angel Vázquez. Indiana University

La cantidad de temas que toca la poesía de Federico García Lorca es, sin duda, muy amplia. Una de las formas en que podría caracterizarlo, entre muchas otras, es como un poeta de otredades. Sólo hay que mirar, por ejemplo, algunos de los temas que más ocuparon al poeta para darse cuenta de ello. Véase en ese sentido la presencia, en Poeta en Nueva York, de la ciudad que tanto aterró y fascinó a García Lorca, y dentro de esa ciudad, los negros y el “jazz,” del que Lorca tanto se gustaba. Véase, por otro lado, la exuberante sensualidad de la gitanería del Romancero gitano. O la fuerza fustigante que en la “Oda a Walt Whitman” pone de manifiesto en contra del “fairy” a quien Lorca contrapone a “los hombres de mirada verde / que aman al hombre y queman sus labios en silencio.” Véase también la presencia del mundo árabe en el Diván del Tamarit.

En el presente trabajo me interesa precisamente esa última alteridad del mundo árabe, y más específicamente, me interesa ver en qué medida Lorca tiene o no una deuda con la poesía arábigoandaluza, mayormente en su Diván. En torno a este tema, es decir, las huellas árabes en la poesía de García Lorca, no he encontrado bibliografía abundante. Sólo dos artículos, de entre los que he podido revisar, esbozan este tema como pregunta central: “Huellas árabes en el Diván del Tamarit” de Mario Hernández y “Lorca and Arab Andalusia” de Roland Pucetti. Hay también otros trabajos que habría que mencionar aquí pues, aunque de manera indirecta, también tocan el tema del orientalismo de Lorca. Por ejemplo, Ian Gibson en su cuidadosa y erudita biografía sobre el poeta traza algunos esbozos de una corriente modal orientalista para la época de los años 20, y Emilio García Gómez en su prólogo a la edición del Divan del Tamarit de 1936 identifica algunas instancias temáticas entre los poemas del Diván y la poesía árabe. De estos y otros estudios haré mención oportunamente.

Antes de pasar a ver el texto del Diván del Tamarit, valdría la pena ver de dónde arranca más o menos el interés de Lorca por lo árabe. Ian Gibson rastrea hasta 1911 lo que tal vez fue el elemento detonador de ese interés. Se trata de una anécdota del joven Lorca cuando tenía 13 años. El 11 de noviembre de 1911 tuvo lugar la primera representación de El alcázar de las perlas, una obra en verso del poeta almeriense Francisco Villaespesa. Federico se encontraba allí y quedó tan impresionado que de regreso a su casa vistió de árabe a una de sus sirvientas, instándola luego a recitar algunos de los versos que él había oído (Gibson 52-53). Años más tarde, en una carta de agosto de 1920 a Antonio Gallego Burín se observa que su interés no ha cambiado: “¿Cuándo sabré hebreo ni árabe?” (Maurer 22). Mario Hernández, por su parte, da noticia de lo que podría ser el acicate que provocó en Lorca el deseo de componer un libro de poesía en homenaje a los poetas arábigoandaluces:


Cambiando proyectos literarios, yo le decía a Lorca que mi propósito era dedicar un libro a un magnate árabe—Ibn Zamrak—cuyos poemas han sido publicados en la edición de mayor lujo que el mundo conoce: la propia Alhambra, donde cubren los muros, adornan las salas y circundan las tazas de los saltadores. Lorca nos dijo entonces que tenía compuesto, en homenaje a estos antiguos poetas granadinos, una colección de “casidas” y “gacelas,” es decir, un “diván.” (3)


Respetuosamente, Hernández advierte que hay que tener cuidado, en ocasiones, con las afirmaciones de Lorca, “pues es conocido como a veces daba por terminadas obras que únicamente estaban en proceso de escritura.” (3)[1] De otra parte, afirma Hernández que “el proyecto del libro pudo tener su arranque—más o menos preciso—tras la lectura, anterior a 1922, de las que denominaría [Lorca] ‘sublimes gacelas amorosas de Hafiz’ halladas, según afirma, en un libro del Conde de Noroña” (3). Otra obra que merece tomarse en cuenta en este sentido son los Poemas arábigoandaluces que Emilio García Gómez tradujo y publicó por primera vez en 1930. Este libro (estudio pionero en los de su clase) causó gran revuelo entre la comunidad intelectual y artística de aquella época, que según explica el propio García Gómez:


se interesaba por la metáfora y la imagen. Y mi colección—por estar basada en un códice de Ben Said, que es cabalmente una antología de fragmentos metafóricos—servía este interés con documentos a la par arqueológicos y novísimos. (13)[2]


García Lorca, de seguro, tuvo acceso a ese texto (Gibson 393) y comenta García Gómez a ese respecto en una entrevista: “I’m convinced that [García Lorca] wrote the Diván del Tamarit thinking of my book” (Tono Martínez 8). Como se verá más adelante el Diván no vino a tener forma definida sino hasta el 1934.

El título Diván del Tamarit desde la primera palabra presupone un referente árabe. La palabra “diván” en términos literarios viene del árabe diwn, que designa el conjunto de poemas de un mismo autor. El Diván del Tamarit, a su vez, está dividido en “gacelas” y “casidas” que son términos que designan, en el caso de “gacela,” un poema de tema amoroso, y en el caso de “casida,” una estructura formal de la poesía árabe. Hay que aclarar que las casidas lorquianas no reproducen esas estructuras formales porque simplemente es imposible traducir las exigencias de ritmo y métrica de una lengua semita a una lengua de raigambre indoeuropea. Lo que este trabajo persigue, más bien, es identificar el uso de imágenes poéticas y tratamientos poéticos de tradición árabe.

Emilio García Gómez, en su introducción de 1936 al Diván, identifica varios fragmentos que podrían tener cierta semejanza con la lírica árabe.[3] Entiende García Gómez que los siguientes versos recuerdan el tema árabe de la visita nocturna:


La noche no quiere venir,

para que tú no vengas

ni yo pueda ir. (“Gacela del amor desesperado” 55)


Recordemos en ese sentido la petición para un encuentro nocturno, que en una jarcha del siglo XI, hace una joven a su amado Ibrahim:


Mew sidi ‘Ibrahim

ya nuemne dolze,

fen-te mib

de nojte.

In non, si non kerís

yire-me tib

¡garme ‘a ‘ob

a fer-te! (García Gómez 83)[4]


Sin embargo, es conocida la enorme cantidad de poemas líricos europeos que tratan el tema de la visita nocturna. Habla también García Gómez de la “valiente desmesura de algunas metáforas”:


La penumbra con paso de elefante

empujaba las ramas y los troncos. (“Casida de las ramas” 55)


No obstante, como se sabe, el surrealismo (al que Lorca no estuvo ajeno) dio pie a muchas de estas imágenes “desmesuradas.”

Mario Hernández, por su parte, encuentra cierto parecido entre unos versos de Al-Mutamid de Sevilla y los últimos versos de la “Gacela de la terrible presencia.” Hernández cita primero de la colección de Poemas arabigoandaluces de Emilio García Gómez el siguiente poema de Al-Mutamid: “Al quitarse el manto, descubría su talle, floreciente rama de sauce, como se abre el capullo para mostrar la flor.”[5] Y comenta:


La situación es parecida, aunque sólo sea por antítesis, a la que se produce en la lorquiana “Gacela de la terrible presencia,” donde el paralelismo de los versos desencadena el temor a ver la belleza subyugadora de un cuerpo y una cintura:


Pero no ilumines tu limpio desnudo

como negro cactus abierto en los juncos.


Déjame en un ansia de oscuros planetas,

pero no me enseñes tu cintura fresca. (36-37)


Pero comentar sobre el efecto desesperante que produce en el poeta el cuerpo del ser amado tampoco es exclusivo de los poetas árabes.

Los ejemplos hasta ahora citados establecen en realidad un paralelismo entre la poesía europea y la árabe más que entre la poesía de Lorca y la lírica árabe. Hay por ejemplo dos poemas a los que podría adjudicarles una actitud arabizante. Se trata de la “Casida de la muchacha dorada” y la “Casida de las palomas oscuras.” En el primero la muchacha, que al principio del poema es dorada, va dorando el agua al bañarse:


La muchacha dorada

era blanca en el agua

y el agua se doraba.


Pero al final el proceso es inverso:


La muchacha dorada

era blanca garza

y el agua la doraba.


En el segundo por una fórmula casi mágica que se conjura con el lenguaje poético, las palomas se nulifican o parecen desvanecerse en la nada:


Por las ramas del laurel

vi dos palomas desnudas.

La una era otra

y las dos eran ninguna.


Muchos estudiosos de la poesía árabe han llamado la atención a cierta obsesión por parte del poeta árabe de jugar con las transformaciones e intercambios valorativos. Luce López-Baralt comenta como para la mentalidad árabe la realidad se vuelve dúctil y aleatoria. La lengua árabe se basa mayormente sobre raíces trilíteras cuyas vocales (signos diacríticos encima y debajo de la raíz) no suelen ponerse en el texto impreso (220-24). El lector de esta lengua, que debe ir vocalizando mentalmente esas raíces, se encuentra con palabras cuyo sentido cambia según se vocalice provocando la asusencia de un sentido único en cada palabra, así por ejemplo la raíz “‘an” igualmente vocalizada quiere decir “ojo” o “fuente” o, por otro lado, de la raíz de sakana que quiere decir “tranquilo” se deriva sikkin que quiere decir “cuchillo.” La transformación entonces reverbera en la lengua árabe.[6] Hay que reconocer que esa obsesión febril por las transformaciones no es patrimonio exclusivo de los poetas árabes, ahí está por ejemplo Góngora con su brillantísimo caleidoscopio metafórico, o más contemporáneo aún, Juan Goytisolo con su prosa tan alucinante. Más bien se trata de un fenómeno generalizado en el mundo de la poesía árabe y aislado en algunos casos de la poesía occidental.

Como se ha visto en los ejemplos anteriores, aquellas características de la poesía de Lorca que de algún modo podrían ligarse a la lírica árabe pueden también ligarse a la tradición poética europea. Al parecer, García Lorca no se ha dado por entero a sus antepasados líricos semitas. Mario Hernández concluye que “se da en Lorca, respecto a su Diván del Tamarit, una ausencia de intención expresa general de partir de modelos concretos de la poesía árabe” (5). Años más tarde, en la edición de 1981 del Diván, Hernández lo caracteriza como “fingido florilegio arábigo-andaluz” (9). A esto hay que añadir que el Diván, como queda dicho, no parece ser un proyecto definido hasta bastante tarde en 1934. Las reescrituras, o mejor dicho los cambios de títulos de algunos de los poemas incluidos en el este poemario, así lo demuestran. La “Casida de las palomas oscuras” apareció más o menos para 1920-21 bajo el título de “Canción”; del mismo modo el título primitivo del Diván no era tal, sino Tierra y luna. De otra parte, en 1933 salen publicados “Casida del sueño al aire libre” y “Gacela del mercado matutino,” este último bajo el título de “Poema.” Esto apunta al hecho de que esos poemas no fueron pensados con la poesía árabe en mente y es posible que a raíz de aquella conversación con Emilio García Gómez en 1934 Lorca haya encontrado el elemento unificador del poemario que previamente pensaba llamar Tierra y luna. No hay duda de la intención arabizante de Lorca al llamar “Diván” a su poemario y dividirlo en “gacelas” y “casidas,” pero, al momento de ir en busca de los elementos árabes en ese libro, hay que admitir que son muy pocos y que más bien le dan a la obra un leve cariz semita.

Para encontrar préstamos más concretos de la poesía árabe en García Lorca, tales como frases o metáforas, habrá que recurrir a otros poemas, pero antes cabría preguntarse (dado que no es posible reproducir las estructuras formales) en qué medida un poeta que escribe en lengua española puede reproducir la lógica interna de un sistema poemático escrito en lengua semita. En Cinco poetas musulmanes, Emilio García Gómez dedica una sección a la técnica poética de Ibn Zamrak, el poeta de la Alhambra, en el que demuestra como un mismo poema puede cambiar su sentido cuando se le cambia el contexto o el título. La poesía árabe está llena de estos poemas que sin el título se convierten en verdaderos acertijos para el lector. Vaya un ejemplo para ilustrar lo dicho:


Es una envoltura formada por dos piezas tan unidas, que es lindo de ver: parecen los párpados cuando se cierran en el sueño.

Si la hiende un cuchillo, dirías que es una pupila a la que pone convexa el esfuerzo de mirar.

Y su interior podrías compararlo al de la oreja, por sus repliegues y escondrijos.

Abu Bakr Muhammad Ben Al-Qutiyya (García Gómez 67) [7]


Para el lector, el poema anterior es una verdadera adivinanza sin cuyo referente, codificado en el título, se hace imposible captar el sentido del mismo. Pero cuando se le anuncia el título (“La nuez”) cobran sentido los “párpados cerrados” (la cáscara cerrada de la nuez), “la pupila convexa” (el exterior de la cáscara) y el “interior de la oreja” (el fruto o tal vez el interior de la cáscara).

Esa es precisamente la mecánica que funciona en la colección de poemas de Miguel Hernández, Perito en lunas; a continuación el quinto poema de ese libro:


Anda columna, ten un desenlace

de surtidor. Principia por espuela.

Pon a la luna un tirabuzón. Hace

el camello más alto de canela.

Resuelta en claustro esbelto pace,

oasis de beldad a toda vela

con gargantillas de oro en la garganta:

fundada en ti se iza la sierpe, y canta. (89)


Como en el poema árabe éste también carece de sentido sin un título que le dé coherencia. El título: “Palmera.” Ahora es fácil descifrar la adivinanza; Agustín Sánchez Vidal interpreta muy atinado: el tronco es la “columna” que termina en “surtidor” (las hojas); las hojas a su vez son como “espuelas” que contra la luna forman un “tirabuzón”; las “gargantillas de oro” son los dátiles; y la “sierpe” el viento que “canta” entre las ramas (89). Como se observa, sí es posible reproducir mecanismos de la poesía árabe a la española y Miguel Hernández es un ejemplo.

Lorca, sin embargo, no toma esta salida y es en otro libro de poemas donde se verá la alternativa que ha utilizado. Se trata, nada menos, que del Romancero gitano. Roland Pucetti ha encontrado unos ejemplos en los que identifica una serie de semejanzas metafóricas entre la poesía de Lorca y la poesía arábigoandaluza. En el primer ejemplo, Pucetti cita dos poemas de la Thirteenth Century Anthology of Ibn Sa’id al Magribi que traduce de la versión española de García Gómez:


One night I spent joyfully on the bend of a river, with a maiden whose bracelets seemed like the curves of the current.

She took off her cloak, revealing a delicate willow branch. How lovely to see the bud opening and the flower appear! (23; enfasis mío)


Ah, my friends! My heart is filled with a willow-waisted beauty, when she leans forward enchantment from her falls.

She has breasts as erect as lances; they arise, however, only to defend themselves against a harvesting. (23)


Y pasa a comparar estos fragmentos con algunas líneas del romance de “La casada infiel,” que, como se sabe, se desarrolla a las orillas de un río:


toqué sus pechos dormidos

y se me abrieron de pronto

como ramos de jacinto.[8]


En otro ejemplo cita un fragmento de otra casida que sólo identifica “de hace ocho siglos”:


At the summit of its stalk, the hands of the brook have built the castles of the lily.

Castles with towers of silver, the defenders surround their prince, holding swords of gold.


Para compararlo también con otro fragmento de “La casada infiel”:


Sucia de besos y arena,

yo me la llevé del río.

Con el aire se batían

las espadas de los lirios. (24)


Por mi parte he encontrado otro ejemplo que quisiera añadir a los ya citados, entre un poema de Ben Al-Zaqqaq:


Las rosas se han esparcido en el río, y los vientos, al pasar, las han escalonado con su soplo,


como si el río fuese la coraza de un héroe, desgarrada por la lanza, y en la que corre la sangre de las heridas. (García Gómez, Poemas arábigoandaluces 130)


Y unos versos del “Romance sonámbulo”:


Trescientas rosas morenas

lleva tu pechera blanca.

Tu sangre rezuma y huele

alrededor de tu faja.


Como se observa, el paralelismo es algebraico: coraza -que cubre el pecho-/rosas (sangre) y pechera/ rosas (sangre). Los paralelismos presentados hasta el momento se basan en imágenes prestadas de una poesía a la otra con ligeros cambios estilísticos, pero hay más.

Federico García Lorca también ha citado textualmente de un poeta árabe en uno de sus poemas. Se trata de la dolorosa expresión del compadre del “Romance sonámbulo” al mocito: “Pero yo ya no soy yo/ ni mi casa es ya mi casa.” Esta misma frase fue utilizada por Ibn Jafaya en 1095 cuando llora a Valencia después de haber sido atacada por el Cid:


La mano de la adversidad ha escrito en tus moradas interiores: “¡Tú ya no eres tú y tus casas ya no son tus casas!”[9]


El ejemplo habla por sí mismo, la frase es exactamente la misma a excepción de la persona gramatical (tú/yo).

Ante estos préstamos orientales sería práctico ofrecer una alternativa que explique la razón de ser de estas pequeñas intervenciones árabes en un romancero gitano. Para eso traigo aquí las palabras de Lorca al comentar sobre su libro.


El Romancero gitano no es gitano más que en algún trozo al principio. En su esencia es un retablo andaluz de todo el andalucismo. . . . Reúno todos los elementos poéticos locales y les pongo la etiqueta más fácilmente visible. Romances de varios personajes aparentes, que tienen un sólo personaje esencial: Granada. (Obras 1659)


¿En qué consiste esa variedad andaluza y sus elementos locales? ¿Qué es para Lorca ser un granadino?


Yo creo que el ser de Granada me inclina a la compresión simpática de los perseguidos. Del gitano, del negro, del judío . . . del morisco, que todos llevamos dentro. (1659)


Lorca muestra estar bastante consciente de las diferentes “castas” (por usar el término de Américo Castro) que, en suma, produjeron su ser andaluz. Y en ese sentido se conduele de la cultura islámica:


Fue un momento malísimo, aunque digan lo contrario en las escuelas. Se perdieron una civilización admirable, una poesía, una astronomía, una arquitectura y una delicadeza únicas en el mundo, para dar paso a una ciudad pobre, acobardada; a una «tierra del chavico» donde se agita actualmente la peor burguesía de España. (1978)


El lector se encuentra ante un granadino consciente de la historia que le precede que ha querido dedicar un poemario a su Granada, tachonado de sutiles arabescos. Cuando comencé este estudio esperaba encontrar una considerable cantidad de préstamos poéticos árabes dado el título del primer poemario que me ocupó (Diván del Tamarit). Sin embargo no fue así y por el contrario, encontré algo más interesante. Lorca en lugar de copiar o imitar la poesía árabe (como podría decirse en el caso de Miguel Hernández), toma algunas de sus imágenes y giros, las necesarias como para darle a su proyecto un sobretono semita sin llegar a los extremos. El Diván del Tamarit más que un libro de poemas a lo árabe, es un libro en homenaje a sus admirados antepasados semitas, pero muy a lo Lorca. El poeta agudamente reconoce la complejidad del mundo que intenta describir y hace que su poesía adquiera las diferentes tonalidades de lo que según él lleva dentro el granadino (el gitano, el negro, el judío y el morisco). Es por eso que el Divan del Tamarit no puede ser unidimensionalmete árabe ni el Romancero gitano únicamente gitano. En el caso del Romancero ya desde su título Lorca ofrece al lector una clave de cómo acercarse a su libro, pues las dos palabras que componen el título presuponen una tensión. El género del romance ha estado siempre asociado a una tradición cristiano-española muy antigua, y la figura del gitano siempre se ha visto como una figura marginal e incluso peligrosa a los ojos de esa sociedad española. El elemento árabe que Lorca percibe como parte integral del ser granadino sutilmente se hace parte de su intrincada poesía. Ya expresaría su posición al respecto con una imagen tan potente como poética:


. . . los sepulcros de los Reyes Católicos no han evitado que la media luna salga en los pechos de los más finos hijos de Granada. La lucha sigue viva y sin expresión . . .; sin expresión, no, que en la colina roja de la ciudad hay dos palacios, muertos los dos: la Alhambra y el palacio de Carlos V, que sostienen el duelo a muerte que late en la consciencia del granadino actual. (1978)


El Diván del Tamarit, el Romancero gitano y tal vez muchos otros poemas son el testimonio de un granadino sensible que se atrevió a mirar su reflejo en las fuentes de la Alhambra.


Obras citadas

Britt, Linda. “Love and Death: Thematic Considerations on Lorca’s Diván del Tamarit.” Mester 15.1 (1986): 22-30.

Eich, Christoph. Federico García Lorca, poeta de la intensidad. Madrid: Gredos, 1958.

Forster, Jeremy C. “A Prodigy of Passion: Lorca’s Last Book of Verse.” Queen’s Quarterly 73 (1966): 261-68.

García Gómez, Emilio. Cinco poetas musulmanes. Madrid: Espasa-Calpe, 1959.

___. Poemas arábigoandaluces. Madrid: Espasa-Calpe, 1971.

___. Las jarchas romances de la serie árabe en su marco. Barcelona: Seix Barral, 1975.

García Lorca, Federico. Obras completas. Madrid: Aguilar, 1960.

___. Poesías completas de Federico García Lorca. Editores Mexicanos Unidos, 1981.

___. Diván del Tamarit. Madrid: Alianza, 1981.

Gibson, Ian. Federico García Lorca. A Life. New York: Pantheon, 1989.

Gil, Ildefonso-Manuel, ed. Fedrico García Lorca. Madrid: Taurus, 1980.

Hernández, Mario. “Huellas árabes en el Diván del Tamarit.” Insula 370 (1977): 3-5.

López-Baralt, Luce. San Juan de la Cruz y el islam. México: El Colegio de México, 1985.

Maurer, Christopher, ed. Federico García Lorca. Epistolario I. Madrid: Alianza, 1983.

Pérès, Henri. Esplendor de al-Andalus. Madrid: Hiperión, 1983.

Pucetti, Roland. “Lorca and Arab Andalusia.” Middle East Forum 31 (1956): 22-25.

Sánchez Vidal, Agustín, ed. Miguel Hernández. Perito en lunas. El rayo que no cesa. Madrid: Alhambra, 1976.

Tono Martínez, José. “Emilio García Gómez: Reflecting on this Century.” Encounters 7 (1992): 5-9.



[1]En ese sentido, Gibson varias veces ofrece el dato de la “mala” costumbre de Lorca de exagerar o alterar los hechos, incluso su fecha de cumpleaños; decía Lorca haber nacido en 1900, cuando se sabe que nació en 1898.

[2]Manejo la edición de 1971 que reproduce la “Advertencia” a la edición de 1940.

[3]Es importante aclarar que García Gómez sólo habla de “alguna semejanza con la lírica árabe” y que en ningún momento pretende negar que esas semejanzas se den en otros contextos poéticos. Las citas que hago de García Gómez pertenencen al prólogo de 1936 al Diván del Tamarit reproducido en la edición de Alianza.

[4]Traducción: Mi señor Ibrahim / ¡oh! dulce nombre, / ven a mí de noche / si no, si no quieres/ iré a ti, / dime dónde / verte.

[5]Cito de la introducción de Mario Hernández a la edición de 1981 del Diván del Tamarit 36.

[6]Llamaron los árabes a la poesía “sihr al-all,” que quiere decir “magia legal.”

[7]La razón de que el citado poema se encuentre en prosa es que en la traducción resulta completamente imposible reproducir la versificación.

[8]Pucetti traduce al inglés la cita del poema de Lorca: I touched her sleeping breasts, / and they opened to me quickly, / like branches of hyacinth. Cf. “Lorca and Arab . . .” 24.

[9]Consignado por Henri Pérès en Esplendor de Al-Andalus, 112. Al parecer se trata de un hemistiquio bastante exitoso, pues, según Pérès, Ibn Jafaya lo tomó de otro poeta, Abu Tammam.

http://www.islamyal-andalus.es/index.php?option=com_content&view=article&id=110:federico-glorca&catid=61:andaluces&Itemid=152

jueves, 31 de marzo de 2011

lunes, 14 de marzo de 2011

viernes, 25 de febrero de 2011

Lorca y Dalí, una adoración mutua... y contradictoria Una exposición evoca los altibajos de la amistad entre el poeta y el pintor

ÁNGELES GARCÍA - Madrid - 22/09/2010

El big bang de la amistad de los dos genios habría que situarlo en el otoño de 1922. Federico García Lorca y Salvador Dalí vivían en la Residencia de Estudiantes y durante ocho años mantuvieron una amistad llena de experiencias artísticas que les llevó a lo más alto de la vanguardia europea. Con una adoración mutua salpicada de altibajos, se entregaron a su respectiva obra con la vista puesta en el otro. En torno a ellos, todo un mundo de modernidad en el que ellos marcaban las pautas.

CaixaForum Madrid reconstruye los vericuetos de esta relación en una exposición conformada por un centenar de cuadros y numerosos documentos escritos. Una película inédita de 35 minutos, filmada por Manuel Gutiérrez Aragón, recrea la peculiar historia de esta amistad a través de las cartas que se intercambiaron los dos personajes.

Comisariada por Juan José Lahuerta, la exposición, patrocinada por la Sociedad Estatal para la Acción Cultural Exterior (SEACEX), intenta contar cómo esa relación repercutió en la obra del pintor y en la del poeta. Durante aquellos ocho años, su afán de modernidad y de trascendencia les lleva a viajar por todos los ismos de la época: cubismo, futurismo, surrealismo... el ambiente intelectual y experimental de la Residencia adquiere un protagonismo fundamental en la exposición.

El impacto de uno en el otro queda fuera de toda duda: también sus consecuencias creativas, ya que Lorca dedicó a su amigo su Oda a Salvador Dalí y este se inspiró en el poeta para su San Sebastián. La exposición recoge también proyectos que finalmente resultaron fallidos, como El cuaderno de los putrefactos (así llamaban a los artistas tradicionales) o el Manifest groc (en el que García Lorca renunció a participar).

La inmersión en la relación artística de estas dos fuerzas creadoras arranca con una galería de retratos y autorretratos de los miembros de la Residencia más vinculados a Lorca y Dalí, como por ejemplo los dibujos que se dedicaron mutuamente. Se cuenta también lo que cada uno de ellos había realizado antes de entrar en la órbita de la Residencia: Lorca se relacionaba ya con las artes plásticas a través del teatro y de la música y había estrenado ya su primera obra teatral, El maleficio de la mariposa, con figurines del pintor Rafael Barradas, uno de los grandes artistas del momento. Dalí había llegado a Madrid para estudiar en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, pero poseía ya un profundo conocimiento de la pintura y tenía en su punto de mira convertirse en el centro de la modernidad.

La aproximación al mundo canalla y de la noche une a Lorca y a Dalí en cuadros poblados por personajes marineros o mujeres solas. Pero la unión es solo aparente porque cada uno tiene formas de aproximación radicalmente diferentes. Mientras que Lorca lo hace con ternura cargada de lirismo, Dalí plasma su cruda visión en piezas como El marinero (1926).

Lo que hay que respetar del mundo clásico y lo esencialmente moderno es el tema de las cartas que ambos se intercambian durante los primeros años de su amistad. Cadaqués, primero, y París, después, son el centro geográfico de ese paraíso de todo lo nuevo. Picasso o Dérain son algunos de sus creadores clave.

Pero el acercamiento de Salvador Dalí al surrealismo de André Breton marca el comienzo del distanciamiento entre ambos artistas. Es el final de los años veinte y la objetividad que habían compartido se transforma en lo que ellos mismos llaman "subjetividad radical". Coinciden en su acercamiento a Miró, pero solo Dalí ensalza las obras de Jan Arp o Marx Ernst. Es el principio del final.


http://www.elpais.com/articulo/cultura/Lorca/Dali/adoracion/mutua/contradictoria/elpepicul/20100922elpepicul_2/Tes?print=1

LUIS GARCÍA MONTERO Memoria revisada de García Lorca Volvamos a lo incontestable

http://www.elpais.com/articulo/cultura/Volvamos/incontestable/elpepicul/20091219elpepicul_6/Tes?print=1

LUIS GARCÍA MONTERO 19/12/2009

"No tuviste tu muerte, la que a ti te tocaba". Es un verso de Rafael Alberti, de la Elegía a un poeta que no tuvo su muerte, dedicado a su amigo Federico García Lorca. Se publicó en el homenaje al poeta García Lorca contra su muerte, que preparó Emilio Prados con motivo del Congreso de Intelectuales Antifascistas celebrado en 1937.

Rafael sintió hasta su vejez la idea de que era él, militante activo del Partido Comunista, quien debería haber muerto en la guerra. Pero se trataba de una culpa innecesaria. Como republicano, discípulo de Giner de los Ríos, director de La Barraca, defensor público del Frente Popular y voz crítica de la peor burguesía de España, el autor de Mariana Pineda tenía motivos de sobra para ser ejecutado sin juicio por los militares rebeldes de 1936.

Cuando mi amigo Andrés Soria Olmedo me encargó en 1986, a los 50 años de la muerte del poeta, una edición facsímil del homenaje antifascista preparado por Emilio Prados en plena Guerra Civil, empecé a estudiar las repercusiones nacionales e internacionales del asesinato de García Lorca. Es una investigación inacabable, porque las bibliotecas y las librerías de viejo todavía me dan sorpresas. Miles de publicaciones y numerosas ciudades del mundo denunciaron los acontecimientos granadinos y la vileza del llamado Ejército nacional. Y siempre con un sentido predominante: Federico García Lorca representa a todas las víctimas de la Guerra Civil española, a la dignidad y la libertad de cualquier ser humano agredido por cualquier violencia, cualquier represión, cualquier totalitarismo.

Una vez completadas las excavaciones en la fosa de Alfacar, sin la aparición de restos humanos, conviene que recordemos el verdadero significado de la muerte de García Lorca, para volver a lo que estuvo claro desde el principio. Olvidemos los rumores, las calumnias, las malas informaciones, los protagonismos mentirosos, las sugerencias equívocas, las mezquinas sospechas sobre la familia, las interpretaciones disparatadas, la audacia de los que están siempre seguros de todo sin saber nada de nada, y volvamos a lo incontestable. García Lorca fue ejecutado por el ejército franquista, entre Víznar y Alfacar, con la implicación de las más altas instancias militares, como uno más de los 5.000 republicanos granadinos que perdieron la vida en una de las represiones más crueles y desalmadas de la historia.

Aunque fuese un republicano más, García Lorca era también un poeta único, y por eso su muerte pasó a representar de forma inmediata el sufrimiento de las víctimas y la dignidad del ser humano contra la barbarie. En nombre de todos los asesinados, García Lorca está ahí, sigue ahí, unos metros más allá o más acá entre Víznar y Alfacar, rodeado de montañas, olivos y emociones históricas, en la fosa desconocida que le asignó el azar macabro de la muerte o los cálculos vergonzosos de los asesinos. Ésa es su significación, su realidad, su honrada leyenda.

Para estar a la altura de la leyenda y la realidad, no queda ahora otra salida que dignificar el parque, ampliarlo, llevarlo si es posible hasta la fosa común más conocida del terreno, defender un gran bosque dedicado a la Memoria Histórica, con la participación de arquitectos y escultores de fama internacional. Granada puede redefinir su identidad. Los que han sabido defender los derechos privados de algunas familias deben asumir también el valor de las causas públicas. Espero que la Junta de Andalucía y la Diputación inviertan dinero en la dignificación de aquel paraje. Y espero que la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ponga en este empeño la misma energía que ha utilizado para abrir las fosas. Si ninguna víctimas de 1936 tuvo la muerte que le correspondía, es conveniente que todas tengan la tumba que merecen.

jueves, 17 de febrero de 2011

"Uno de los asesinos materiales de Lorca era un familiar directo suyo"

El investigador Miguel Caballero presenta el documental 'Lorca en África' en el Palacio de los Condes de Gabia mientras ultima un libro sobre las últimas 13 horas de vida del poeta de Fuente Vaqueros
G. Cappa / Granada | Actualizado 17.02.2011 - 08:05
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"De testimonios orales nada, yo trabajo a base de información documental, voy como una hormiga recopilando expedientes de unos y otros y situándolos para intentar cerrar el libro de Molina Fajardo, que dejó incompleta su investigación". Es el método de trabajo del historiador Miguel Caballero, que ayer estrenó en el Palacio de los Condes de Gabia el documental Lorca en África, que recoge imágenes en movimiento inéditas del autor de Poeta en Nueva York. El documental, que se enmarca dentro del proyecto de la Diputación Hoy, quizás, es la prolongación gráfica del libro del mismo título que Caballero presentó el año pasado.

"Estuvimos dos semanas rodando en Marruecos por los escenarios por los que se movieron Federico García Lorca y Fernando de los Ríos", explica Miguel Caballero. Es la crónica del viaje oficial a finales de 1931 del ministro de Instrucción Pública de la II República acompañado en calidad de secretario personal por el poeta de Fuente Vaqueros. "Esta es una de las aportaciones interesantes de este trabajo porque es la primera vez que se puede demostrar documentalmente que Lorca fue secretario de Fernando de los Ríos, tal y como apareció reflejado en la denuncia que dio lugar a su detención", explica el director, que estuvo acompañado en la presentación por la Diputada de Cultura, Asunción Pérez Cotarelo. En el rodaje, Caballero localizó unas imágenes de Lorca en movimiento bajando del barco en Ceuta, un material que pertenece a una familia cuyos miembros eran masones y tenían unos concesionarios de coches. "Era una familia pudiente que grabó el momento histórico en el que Fernando de los Ríos baja del barco y aparece Lorca de manera indirecta en el primer viaje oficial que hizo la República al protectorado español, un acontecimiento histórico", prosigue Caballero. "Pero la gran sorpresa ha sido la aparición de Lorca en las imágenes porque no se tenía conocimiento de su presencia en el Norte de África".

Un dato muy curioso de la cinta es que "demuestra que García Lorca y De los Ríos se alojaron en la residencia del general Cabanellas, uno de los militares que años después participó en el alzamiento", afirma Caballero, que también ha recopilado información que prueba que el poeta visitó a un primo hermano suyo que era farmacéutico en Tetúan y que falleció en 1938 como consecuencia de una sobredosis de morfina. Además, el viaje fue especialmente importante en la vida de Lorca porque se dedicó a visitar las comunidades sefardíes y la masonería local. En base a ese viaje hubo periodistas que le acusaron de ser representante del judaísmo, la masonería y el comunismo. "Por esto se le hizo el expediente para condenarlo a 30 años de cárcel por parte del Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo, papeles que están en en el Archivo de Salamanca", concluye.


http://www.granadahoy.com/article/cine/907457/natalie/portman/frente/oso.html

martes, 1 de febrero de 2011

El laboratorio de las vanguardias cumple 100 años

http://www.ideal.es/granada/v/20100816/cultura/laboratorio-vanguardias-cumple-anos-20100816.html
La Residencia de Estudiantes, baluarte del progreso educativo y cultural, llega al centenario con las miras puestas en el exterior
16.08.10 - 01:57 -
EDUARDO LAPORTE | MADRID.

En 1930, Luis Buñuel estrenaba en París 'La edad de oro', una corrosiva película que permaneció tan sólo seis días en cartel, con lleno de público. Fue retirada por presiones de grupos de extrema derecha que, escandalizados, destrozaron la sala durante una de las proyecciones. Fue una de las obras con las que este aragonés, ilustre huésped de la madrileña Residencia de Estudiantes, grabaría su nombre en la historia del cine. No sabía entonces que estaba contribuyendo al desarrollo de la particular edad de oro de ese centro creado por la Junta de Ampliación de Estudios, que nació a su vez como emanación de la Institución Libre de Enseñanza.
La Residencia, inaugurada el 1 de octubre de 1910 en sus instalaciones provisionales de la calle Fortuny, sería testigo y motor de un periodo de florecimiento en las artes que se ha conocido como la Edad de Plata y que el catedrático de Literatura José-Carlos Mainer ubica entre los años 1902 y 1939. Una Edad de Plata que sería de oro para la Residencia de Estudiantes, que recogió en aquel periodo los frutos de tres generaciones: la del 98, la del 14 y, especialmente, la del 27. Nombres como el de Federico García Lorca, Salvador Dalí, Luis Buñuel, Emilio Prados, Rafael Alberti o José Moreno Villa (que vivió allí veinte años) quizá no significarían nada, sin la existencia de esa institución, que actuó como un auténtico laboratorio de las incipientes Vanguardias.
Con cien años, los mismos que cumple la Gran Vía de la capital de España, la 'Colina de los Chopos', como la bautizó Juan Ramón Jiménez, afronta la efemérides con la vista puesta en aquellos años florecientes, pero sin dejar de mirar hacia adelante. «No evitamos la prospectiva de futuro, no va a ser sólo un recordatorio del pasado», remarca Alicia Gómez-Navarro, directora del centro cultural. Uno de los propósitos para ese futuro es el de abrirse al exterior y colaborar con otras entidades como el Instituto Cervantes o el Colegio de México, con el que ya existe una estrecha relación. Con la programación sin cerrar del todo, se pretende reeditar el facsímil de la revista 'Residencia', que incluye conferencias de aquellas personalidades de primera fila que visitaron por entonces el 23 de la calle Pinar: Madame Curie, Einstein, Marinetti, Ravel, Blaise Cendrars, Chesterton, Bernard Shaw, H. G. Wells o Paul Valéry. También continuará la labor editorial, con los epistolarios de Juan Ramón y distintos audiolibros, y se programarán exposiciones relacionadas con los años fecundos de 'la Resi'. Una de ellas recreará la visita que hizo Le Corbusier a Madrid en 1928, y en la que ofreció dos conferencias en la Residencia que entonces dirigía con total dedicación Alberto Jiménez Fraud.
Cien años en los que este emblemático lugar ha pasado de creer en una «futura misión espiritual de España», como dijo el citado Jiménez Fraud, para convertirse, con el nuevo equipo que entró en 1986, en un centro que acoge a 23 becarios, en estancias cortas, y que organiza distintas actividades culturales. Cien años de vida de los que 26 fueron especialmente prodigiosos y que contribuyeron, como señala su actual directora, a la construcción europea. No en vano la UE les distinguió hace tres años el sello de Patrimonio Europeo, honor que comparten en España con el Monasterio de Yuste o el Archivo de la Corona de Aragón, y con la Abadía de Cluny o la Acrópolis de Atenas, fuera de nuestras fronteras.
Proyecto ambicioso
La Residencia de Estudiantes no se puede entender como un ente aislado, sino como parte de un proyecto educativo que buscaba la modernización sociocultural de España, del que este edificio era la punta de lanza. «La Residencia pretendía ser un proyecto piloto, un nuevo modelo educativo, universitario, a la manera de los 'colleges' de Oxford y Cambridge, y la idea era exportarlo a otras universidades», explica la actual directora, Alicia Gómez-Navarro. De parecida manera se expresa Álvaro Ribagorda, historiador de la Universidad Complutense y autor de una tesis doctoral sobre la Residencia. «Todo emana de la Junta para la Ampliación de Estudios, que es un macroorganismo para el desarrollo de la ciencia en España en el que la Residencia de Estudiantes no es sólo un colegio universitario, sino su escaparate más visible, al tener una mayor repercusión social que los laboratorios científicos», señala.
La Junta para la Ampliación de Estudios, hoy Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), heredera de la Institución Libre de Enseñanza, aglutinó en torno a ella espacios para la investigación como el Centro de Estudios Históricos o el Instituto Nacional de Ciencias Físico-Naturales, en el que los pensionados iban y venían del extranjero como en los centros más punteros del resto de Europa. «Supuso la modernización de la ciencia hasta niveles insospechados, hasta que llegó el colapso de la guerra», asegura Gómez-Navarro.
Porque aquellos años promisorios iban a resultar, a la postre, efímeros, y todo el trabajo realizado, las bases sentadas en aquel proyecto de modernización, se derrumbarían con la llegada del franquismo. «Aquí no quedó ningún papel, no quedó nada, el edificio quedó totalmente devastado», se lamenta Gómez-Navarro. No obstante, no se produjo una liquidación física de las instalaciones que componían la Junta para la Ampliación de Estudios, sino que se reconvirtieron en el CSIC, una institución que, según el autor de la tesis sobre la Residencia, Ribagorda, se empleó durante el franquismo como plataforma ideológica y de adoctrinamiento. «Franco destruyó por completo la Residencia de Estudiantes, pero fue una jugada hábil, porque lo que hicieron fue suplantarla; después se difundieron una serie de calumnias sobre lo que había sido la Residencia y la Junta para la Ampliación de Estudios», sostiene Ribagorda.
La ciencia debería empezar de cero a partir de 1940, como comenta la directora actual del centro, ya que gran parte de los científicos se exiliaron, cuando no fueron depurados de sus puestos y sus cátedras. «Para todo el país fue una gran ruptura, pero para la ciencia, y esto es quizás menos conocido, fue brutal».
Encarna ese desolador mapa de posguerra, que recuerda al protagonista de 'Tiempo de silencio', impedido para la investigación científica por la falta de recursos, el primer director de la Residencia, Alberto Jiménez Fraud. Imbuido del espíritu reformista de Francisco Giner de los Ríos, Jiménez Fraud se entregó en cuerpo y alma a este proyecto educativo, pero no pudo ver culminada, ni mucho menos, la que fue la obra de toda su vida. «Salió de España habiéndolo perdido todo», dice Álvaro Ribagorda. Según el experto, Jiménez Fraud quedó a partir de entonces como una «figura marginal» al que invitaron las universidades de Oxford y Cambridge a dar clases y conferencias, pero cuya trayectoria quedó más que truncada. Murió en Ginebra el 23 de abril de 1964. Para recuperar el legado de la primera época de la Residencia, que es uno de los objetivos que se ensalzan en este centenario, se creó el Centro de Documentación, con especial incidencia en la Edad de Plata de la cultura española contemporánea.
Magma creativo
La vertiente científica de la Residencia, con su equipamiento de laboratorios como aporte a la escasez imperante en muchas de las facultades, tuvo, sin embargo, menos repercusión que la artística o cultural. Porque en esa 'Colina de los Chopos' coincidieron personalidades que, de un modo simbiótico, llegarían a convertirse en los artistas españoles más reputados del siglo XX. Luis Buñuel en 1917, Lorca en 1919 y Dalí en 1921 fueron los creadores más destacados y fecundos que ingresaron en aquella Residencia rodeada entonces por una enorme extensión de campos de trigo, al norte de Madrid.
Pese a la fama de lugar selecto y poco menos que elitista, las habitaciones de 'la Resi' acogían sobre todo a hijos de familias de clase media. Lo recordaba Pepín Bello, testigo de excepción de aquel magma creativo, en 'Conversaciones con Pepín Bello'. «No eran hijos de gente rica, como mucha gente cree. Lo que había era mucho orden, mucha limpieza, mucha disciplina, mucha educación pero no era un lugar caro en absoluto. Estaba subvencionado por el Estado. Era público», matizaba el longevo Bello un año antes de su muerte, en 2007. ¿Cómo era aquella Residencia?, le preguntan a este conocido «artista sin obra», en definición de Enrique Vila-Matas. «Se caracterizaba por el buen gusto, la libertad absoluta, el buen tono y la sencillez extrema, heredada de la Institución Libre de Enseñanza». Unas condiciones para el desarrollo de los diversos talentos que sus residentes demostraron eficaces con su legado posterior, ya inmortal. El poeta José Moreno Villa cogió tanto gusto a esa interinidad que permaneció durante veinte años, hasta que no tuvo más remedio que abandonar la Residencia, en noviembre de 1936. Ponía fin, con su salida, a toda una época: «Yo trabajé hasta el último momento, mientras encima de mi cuarto luchaban los aviones defensores de Madrid contra alemanes e italianos».

lunes, 31 de enero de 2011

Medio pan y un libro.









Locución de Federico García Lorca al Pueblo de Fuente de Vaqueros (Granada). Septiembre 1931.

"Cuando alguien va al teatro, a un concierto o a una fiesta de cualquier índole que sea, si la fiesta es de su agrado, recuerda inmediatamente y lamenta que las personas que él quiere no se encuentren allí. ‘Lo que le gustaría esto a mi hermana, a mi padre’, piensa, y no goza ya del espectáculo sino a través de una leve melancolía. Ésta es la melancolía que yo siento, no por la gente de mi casa, que sería pequeño y ruin, sino por todas las criaturas que por falta de medios y por desgracia suya no gozan del supremo bien de la belleza que es vida y es bondad y es serenidad y es pasión.

Por eso no tengo nunca un libro, porque regalo cuantos compro, que son infinitos, y por eso estoy aquí honrado y contento de inaugurar esta biblioteca del pueblo, la primera seguramente en toda la provincia de Granada.

No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.

Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos libros?

¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una palabra mágica que equivale a decir: ‘amor, amor’, y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: ‘¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!’. Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua: pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.

Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser: ‘Cultura’. Cultura porque sólo a través de ella se pueden resolver los problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz.