sábado, 26 de septiembre de 2009

El juego de lobicos

"El juego de lobicos era el más emocionante y el que ansiábamos todos, a pesar del miedo atroz que nos invadía. Un niño que hacía de lobo se escondía entre sacos y arados y los demás se paseaban por toda la cámara, despreocupados y como si nada pasara. De pronto, unos cuantos cerraban las ventanas y la oscuridad se hacía completa. Todos corríamos a escondernos mudos de pavor. El niño que estaba escondido decía con voz cavernosa ¿Que viene el lobico!", y nosotros nos apretábamos unos contra otros y empujábamos con fuerza la pared como si quisiéramos penetrar en ella. El niño se rebullía entre los sacos y gritaba más fuerte y trágico: ¡Que sus come el lobico ! . Nadie se atrevía a moverse ni respirar, y los más chicos comenzaban a sollozar!
Como los ojos se habían acostumbrado a la oscuridad, se distinguía todo perfectamente y se veía al niño lobico levantarse en medio de los sacos, y con las manos abiertas puestas sobre la cara y moviendo los dedos como para espantar, aullaba muy fuerte:
-¡Que sus como que soy el lobico!
Nuestros corazones latían con fuerza y nos abrazábamos unos con otros formando un pelotón. El lobico salía entre los sacos y se dirigía muy lento hacia nosotros, con los brazos en alto. Entonces todos comenzábamos a chillar y nos queríamos tapar unos con otros.
Entonces yo me figuraba que aquel niño era un lobo que me iba a tragar y se apoderaba de mí un temblor escalofriante. Entonces sentía gran consuelo cuando algún niño, en su lucha por esconderse, me tapaba con su cuerpo.
¡Au! ¡Au!», gritaba el lobico y, cada vez que daba un paso, y cuando ya nos iba a coger, la emoción era tan grande que todos comenzábamos a chillar asustados y los pequeñines sollozaban muy apenados. Todos salíamos corriendo perseguidos del niño y era angustioso sentir detrás el aullido del lobo en medio de la más cerrada oscuridad.
Cuando alguien se veía apurado en la persecución del lobico, se arrimaba a la pared y decía, jadeante y muy deprisa: «¡Chichirí ave, que echo mi llave!», y ya estaba a salvo de las uñas de la fiera. Las ventanas se abrían de repente y el lobico se moría tumbándose en los sacos, y todos respirábamos como si nos hubieran quitado un peso de encima".

Poesía en movimiento


Una cinta muestra imágenes inéditas de los poetas de la Generación del 27 rodadas en 1928 por Juan Guerrero, secretario de Juan Ramón Jiménez



AGENCIAS Tras tres décadas de intentos fallidos y de "gestiones variopintas", ve la luz el documental ´Deseo y realidad. Imágenes y palabras de los poetas del 27´, que contiene las únicas imágenes filmadas que existen de los escritores de la Generación del 27, rodadas en 1928 por Juan Guerrero Ruiz.

Dirigido y rescatado del olvido gracias a Rafael Zarza, en colaboración con Fernando G. de Canales, el documental muestra imágenes de Lorca en Buenos Aires en el estreno de ´Bodas de Sangre´; aparece Cernuda en el exilio, muestra a Rafael Alberti llegando a París o a María Teresa León leyendo un extracto de ´Marinero en tierra', escrito por su marido, Rafael Alberti.

Rodados con una cámara Pathé Baby de 9,5 milímetros, los 24 rollos de película filmada son probablemente parte de un documental que Guerrero Ruiz (Murcia, 1893 - Madrid, 1955) intentó realizar sobre la Generación del 27, de la que fue uno de sus grandes pilares. Amigo y colaborador de poetas y pintores, fundador de revistas literarias como ´Índice´ y ´Verso y Prosa´, Guerrero Ruiz fue "cónsul general de la poesía", según lo describió Federico García Lorca.

Para Rafael Zarza, que encontró estas imágenes por "casualidad", que después restauró milímetro a milímetro la Filmoteca, este documental es un "homenaje al espíritu de amistad" que había en esta generación, en la que también hubo "malentendidos", reconoció Zarza

Aunque la mayor parte del documental, que dura 61 minutos, está integrado por fotografías e imágenes de la época, –hilvanadas con la textos de poetas como Juan Ramón Jiménez, Luis Cernuda, Pedro Salinas o Rafael Alberti, leídos por Luis Alberto de Cuenca o Luis Antonio de Villena– la película contiene escenas inéditas en donde aparece García Lorca montando ´La Barraca´ o Jorgue Guillen, ya anciano, hablando de la importancia del ´Romancero Gitano´ de Lorca.

Zarza matizó que con este documental no han pretendido hacer nada "original" sino mostrar ese cine de vanguardia de la época siguiendo los criterios del momento y "lo que ellos hubieran hecho, si hubieran tenido que hacer cine", explicó este director.

El título del documental, 'El deseo y la realidad', está inspirado en el célebre libro recopilatorio de la poesía de Luis Cernuda ´La realidad y el deseo´. Tiene dos partes, en la primera, que abarca los años 1927 y 1928, refleja "el deseo" vital de aquellos jóvenes poetas; en la segunda parte, que va desde los años 1929 a 1936, se plasma "la realidad" en la que discurrirán sus vidas.

Durante la presentación, Zarza recordó cómo el documento llegó a sus manos casi por "casualidad" y gracias a los lazos de amistad de su familia con el autor de la filmación, Juan Guerrero. El autor de la recuperación de un documento tan excepcional –el único que existe de los escritores de aquella Generación– las descubrió hace treinta años acompañando a su padre en una visita al domicilio de la viuda de Juan Guerrero Ruiz, cuyo hijo se las dio, sin saber su contenido, entre otros materiales.

El documental está coordinado por el Instituto Cervantes y coproducido por la SECC y Ojomóvil & Asociados y el patrocinio de la Fundación CajaMurcia, después de varios intentos de "compra" de las imágenes por algunas universidades americanas, según explicó Rafael Zarza.

Asimismo Zarza descartó que el vídeo se vea en los cines o exista una distribución comercial porque "cualquier historia comercial lo banaliza y convierte todo en un espectáculo", declaró.

Por su parte, Carmen Caffarel, directora del Instituto Cervantes, organismo encargado de coordinar esta iniciativa y proyectar el documental en sus 72 centros Cervantes de todo el mundo, aseguró que ´Deseo y realidad´ es un documento "trascendental" que contiene las "únicas imágenes en movimiento" de los poetas del 27. Hoy, a partir de las 19.30, se proyectará en la sede del Instituto Cervantes en Madrid.
León Gieco
´Cuando leo a Lorca, me pregunto quién sería el tipo que apretó el gatillo´



El autor del himno antimilitar ´Sólo le pido a Dios´ ofreció en el Teatro CajaGranada Isidoro Máiquez un repaso de los temas más importantes de su cancionero.

EDUARDO TÉBAR Acaba de aterrizar en Granada procedente de Tel Aviv. Todavía amodorrado por las horas de vuelo, el músico recibe las preguntas con ganas. Una vez entrado en materia, charla con esa esponjosa locuacidad tan propia del pueblo argentino. León Gieco (Santa Fe, 1951) es el mesías de la música de su país.

Pionero en la mezcla del rock con los sonidos tradicionales. Astuto letrista y predicador de la cara más marginal de la sociedad. A él pertenece un importante pedazo de la canción de autor hispana de los últimos cincuenta años. Temas como ´Cinco siglos igual´, ´La colina de la vida´ o ´La memoria´ pertenecen al recuerdo colectivo de la comunidad ´argenta´. Tras el concierto, fue homenajeado con un recital en el que participarán Salvador Amor y Carlos Andreoli, entre otros artistas.

–Aquí le identifican más con la voz de Ana Belén en ´Solo le pido a Dios´. ¿Qué representa para usted esa canción?
–Ana Belén tuvo un éxito muy grande; vendió muchas ´placas´. Si fuese un cantante especulador, habría aprovechado para venir a proclamar mi autoría. Pero estaba saturado de trabajo en Argentina. No me atraía convertirme en un inmigrante en España. Ningún inmigrante cambia de país por gusto. Suele pasar por dictaduras sangrientas, como nos pasó a nosotros. Incluso en los peores años de Ménem, con toda la corrupción y el neoliberalismo, los creadores y los intelectuales deben hacer frente a pesar de los problemas. En los noventa grabé mis mejores discos. Canciones más fuertes terminadas en Los Ángeles con músicos de James Taylor y Crosby, Still, Nash & Young.

­–Sin embargo, con esa canción usted sufrió en sus carnes la amenaza y el exilio.
–La compuse en el 78. Me trajo muchos quebraderos de cabeza. El problema no era la canción, sino yo. Ya venía siendo prohibido desde la época anterior al gobierno militar. La escribí pensando en la posibilidad de guerra entre Argentina y Chile, un conflicto manejado desde Estados Unidos. Los pueblos argentino y chileno no tenían nada que ver con sus dictaduras. Si algo hizo bien el Vaticano fue mediar. En ´Sólo le pido a Dios´ está inserto el tema de la guerra, pero también otras cuestiones personales. Habían ´volado´ de Argentina a Mercedes Sosa, Horacio Guarany y, mucho antes, a Atahualpa Yupanqui. Un jefe militar me dijo que no podía componer un tema de paz en tiempos de guerra. Su determinación era absurda y burra. Me pusieron la equis en la radio y en la televisión. Después, empezaron las amenazas telefónicas. Por primera vez, salí de gira: me obligaban al exilio.

­–Apoyó a Néstor Kirchner. ¿Qué opina del reciente varapalo de su esposa en las urnas?
–Parece que los gobiernos que pintan bien, están condenados a un rápido desgaste en Argentina. Pasó en el 83 con Alfonsín. Kirchner empleó una política diferente al neoliberalismo. Fomentó la exportación y los derechos humanos. En ese sentido, fue un ejemplo para el mundo.

–El mes pasado le nombraron Honoris Causa en la Universidad de Rosario. ¿Cómo lleva lo de que le llamen Doctor Gieco?
–Es un premio a la trayectoria. Me han dado dos a los largo de mi carrera. El primero fue un Grammy que me otorgaron con César Camargo Mariano. Se trata de un reconocimiento a lo hecho. A las piedras y a los paredones que cruzamos para llegar a ser lo que somos. He grabado más de cuarenta discos, he compuesto más de trescientas canciones. He cantado a la justicia y al amor.

–Debutó en la música compaginando formaciones folclóricas y conjuntos de rock n´ roll. ¿No se volvía loco?
­–Arrastro esa dualidad desde chiquito. A los siete años cantaba canciones de Atahualpa Yupanqui. Me enteré de que lo echaron del país y empecé a tomar conciencia. Me encantaban los Beatles, Rolling Stones, Who, Jimi Hendrix y Spencer Davis Group. Copiábamos el formato de tres guitarras y bombo. El de Los Charchaleros. Pensábamos en sumarle una cosa a la otra. En el 65, mi corazón se alió con los primeros movimientos del rock nacional. La canción ´La balsa´, de Los Gatos, supuso un fuerte impacto popular. Cuando cumplí 18 años, compuse mi primera canción bajo el influjo de Bob Dylan y Claudio Gabis. Fíjate qué dupla: el primer guitarrista del rock argentino y Bob, al que considero mi hermano mayor.

–Ha preguntado varias veces por la Casa-Museo de Lorca desde su aterrizaje en Granada. ¿Guarda vínculos poéticos con España?
–Leo muchísimo a Lorca y me siento poéticamente unido a él. Cuando lo repaso, siempre me quedo pensando quién sería el tipo que apretó el gatillo. Fue Franco. El otro día encontraron al asesino de Víctor Jara, un pobre albañil. Debe ser una gran carga haber matado a gente así.

«Me marcho porque la situación es insostenible»



Luis García Montero abandona la UGR después de escuchar las tesinas de los alumnos en su último día en la Facultad de Filosofía y Letras. Admite que se va lleno de "melancolía"


Luis García Montero sale del aula del decanato tras evaluar las tesinas. Charo Valenzuela

EDUARDO TÉBAR
Cansado, como su vista, se despidió ayer Luis García Montero de la Facultad de Filosofía y Letras. Harto de aguantar una situación que considera "insostenible". Así abandonó la UGR a medio día el Premio Nacional de Literatura. Uno de los profesores más queridos y admirados de Filología Hispánica. El referente poético que ha impulsado a varias generaciones de jóvenes a matricularse en esa carrera. El hombre cuyos libros despiertan la vocación por las letras de numerosos estudiantes.

Parecía un día cualquiera de septiembre. El mismo frescor a las diez y media de la mañana. La misma estampa de la facultad con los pasillos casi vacíos. Pero el grupo de licenciados que exponían sus tesinas doctorales era consciente de la secreta solemnidad del momento.

Enfundado en vaqueros, chaqueta verde y camisa de rayas, el veterano maestro leía concentrado los trabajos de sus discípulos. Encajaba la montura desmontable de sus lentes cada minuto. Alzaba la mirada ante cada reflexión llamativa de los ponentes. Ellos, tensos y mentalizados. Él, sumergido en la montaña de conclusiones sobre la poesía de Vicente Huidobro o Ernesto Valencia. Sin circos ni fuegos artificiales. Sólo literatura.

"Siento melancolía por interrumpir mi actividad en la universidad", confesó García Montero en un receso, antes de continuar su labor. "Al mismo tiempo, me llena de alegría pasar el último día en la facultad rodeado de amigos y alumnos", añadió. El próximo 30 de septiembre entra en vigor la excedencia solicitada por el autor de ´Habitaciones separadas´. Tomó la decisión tras conocer la condena del pago de una multa de 1.800 euros y una indemnización de 3.000 euros al profesor José Antonio Fortes. ¿Los motivos? Según el juez Miguel Ángel Torres, proferir insultos a través del diario El País "con ánimo de menospreciar y vejar". La respuesta social en apoyo a García Montero resultó abrumadora. Aunque no frenó la voluntad del catedrático.

Motivos. Ayer, en un lapso tras hora y media de concentración académica, el docente revelaba sus razones. "Necesito un tiempo de respiro hasta que cambien las aguas por aquí". García Montero no soporta la contaminación del aire del departamento –el de Literatura Española– que comparte con Fortes. "Es complicado que el ambiente cambie. He convivido durante muchos años con alguien que, cinco minutos antes de entrar, me había acusado en público o por escrito del suicidio de un amigo". Se refiere al poeta granadino Javier Egea, que se quitó la vida en el verano de 1999.

Ahora, el poeta tiene previsto colaborar con CC OO. El sindicato le ha ofrecido implicarse en su fundación de estudios de memoria histórica. Además, se encuentra preparando un volumen sobre la figura de Lorca y continúa desarrollando su producción poética. No interrumpirá sus intervenciones en prensa ni su participación en cursos y conferencias en otras universidades.

Con todo, el cuerpo le pide serenidad. "En cualquier otro país del mundo, si se hacen bromas con el Holocausto, uno puede tener problemas con la justicia. Aquí, al contrario, se hacen bromas sobre si a García Lorca lo torturaron o no lo torturaron. Y encima se le da un premio de 3.000 euros al que lo dice", lamentó el protagonista de la jornada.

Espinas. Otra esquirla clavada. En ese caso, por la conferencia que Fortes impartió en un acto auspiciado por la Cátedra García Lorca. Un oprobio inaudito, según el profesor, para la memoria de Federico. En la cátedra presidida por Antonio Carvajal, Fortes vilipendió ante los asistentes al autor de ´Poeta en Nueva York´, declarando que a Lorca "no le hicieron lo que a muchos profesores universitarios. Ya está bien de pasión. A Lorca no lo torturaron", sentenció Fortes.

El catedrático está convencido de que el departamento atraviesa una etapa turbia. Critica el debilitamiento de las humanidades, que en otras épocas ocuparon un peso mayor. No obstante, recalcó que estudios como los que se encontró sobre Felipe Benítez Reyes, Rafael Alberti o Ángel González "evidencian la calidad de la universidad granadina". El poeta confió "en la fuerza y en la tradición de la institución", con el pensamiento optimista de que "las cosas pueden ir a mejor".

Luis García Montero ya piensa en pasado. Su relación con la UGR pasa página. En estos instantes pisa suelo italiano. Disfruta en el Poesia Festival 09 de Módena. Contento y en paz con los suyos.